Padre amado, en el nombre de tu amado Hijo Jesucristo, venimos ante Tu trono de gracia a suplicarte una bendición especial para todas las madres sobre la fas de la tierra, te rogamos que ellas sean como árboles plantados junto a corrientes de agua, que den su fruto a su tiempo y que su hoja no caiga y que todo lo que ellas emprendan ses prosperado, te pedimos Señor que sus vestiduras sea fuerz y honor, y que ellas se regocijen en el provenir. Que abran su boca con sabiduría, y que la ley de bondad esté en su lengua. Porque mujer virtuosa, ¿quién la hallaré? porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas, te damos gracias por sus vidas, porque el corazón de su marido está en ellas confiado y no carecerá de ganancias, porque ellas le dan bien y no mal todos los días de sus vidas, bendita mujer, que es como nave de mercader; trae su pan de lejos ella considera los caminos de su casa y no come el pan de balde, sus hijos la llaman bienaventurada; y su marido también la alaba, porque muchas mujeres hicieron el bien pero ellas sobrepasan a todas. Gracias, Padre porque el propósito principal de cada mujer es conocerte, amartte y disfrutar tu presencia. Al final el fruto de su trabajo se verá y ellas recibirán alabanzas. Te pido Padre, que les multipliques este día la sabiduría y la inteligencia y que ellas enseñen a sus hijos en el camino que deben andar, para que aun cuando sus hijos sean viejos no se aparten de ti. Señor, que ellas edifiquen sus casas con sabiduría, y con entendimiento las afirmen. Que todas sus habitaciones sean llenas de sabiduría y de todo bien preciado y agradable. Que sus respuestas sean blandas porque ellas odian la ira, porque saben que las palabras asperas hacen subir el furor, que ellas sean humildes, sumisas y obedientes a Ti y por ende a sus esposos; dejando así un maravilloso legado a sus hijos, de humildad, sumisión y obediencia. Gracias amado Padre celestial porque todas esas mujeres, invocan Tu nombre, se humillan, oran y buscan tu rostro, se han convertido de sus malos caminos y por eso tu las escuchas desde los cielos y perdonaras sus pecados y sanarás su tierra.Te ruego que ellas sean fuertes, que sus manos no desfallezcan, porque su obra será recompensada. Ella se levantan y luchas contra las tinieblas en sus vecindarios, y ciudades. Nunca se darán por vencidas porque anhelan con todo su corazón un mejor futuro para sus generaciones y te ruegan por un avivamiento en toda la tierra y esta sea sanada. Gracias, Padre amado porque ellas son mujeres que te temen y por eso serán alabadas, te ruego que les des el fruto de sus manos y alábenla en las puertas sus hechos. Bendita seas tú, madre! Administradión Vasijas de Honra
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